Primera Cruzada: Fue
desarrollada entre 1096 y 1099, fue integrada por la cruzada de los pobres, la
cual consistía en gente humilde que era dirigida por Pedro el Ermitaño, en el
cual fueron masacrados.
Posteriormente aparece la cruzada de los príncipes que obtuvo
mayor suerte ya que pudiera tomar Jerusalén en 1099 en base a una buena organización
con fuerzas como Francia, Países bajos y Sicilia. Obtuvieron muchas ganancias
con las que crearon cinco estados feudales y diversos castillos, pero fueron
atacados por los turcos y perdieron el estado de Odessa.
Segunda
Cruzada: Fue organizada por San Bernardo, en esta tomaron injerencia
activa los reyes cristianos como el rey de Francia (Luis VII) y el emperador
germano (Conrado III) sin tener logros en sus participaciones.
Los turcos volvieron a
conquistar Jerusalén (1171), Reinaldo de Châtillon
violo las treguas y a la piratería, matando a a hermana de Saladino y el sultán
se cobra venganza ejecutando al asesino de su hermana luego de la derrota
cristianan en la batalla de cuernos de Hattin (1187).
Tercera
Cruzada: Resulto un fracaso el cual se atribuye a la
enemistad entre Francia e Inglaterra y entre los cristianos de occidente y el
imperio de oriente.
Cuarta Cruzada: Se realizo en
contra de Egipto por vía marítima, fue organizada por el papa Inocencio III
(1199). La cual resulto ser una cruzada de cristianos contra cristianos.
Otra cruzada fue
realizada en contra de los paganos de la cuenca del báltico (entre los siglos
XII y XVI) por Dinamarca, Suecia y Alemania.
Quinta Cruzada: Fracaso en su intenciones, dirigida por Inocencio III (1218),
con la intención de conquistar Egipto.
Sexta
Cruzada: se realizó sin permiso papal (1228),
realizada por Felipe II. Logró reconquistar Belén, Nazareth y Jerusalén,
convirtiéndose en su rey por decisión personal, aunque Jerusalén fue nuevamente
ocupada en el año 1224.
Séptima Cruzada: Se
motivo por la toma de Jerusalén, organizada por el rey Luis IX de Francia, pero fue un
fracaso rotundo, culminando con su líder prisionero.
Octava Cruzada: Luis
IX de Francia, una vez en libertad, organizó otra Cruzada (1269), con peor
suerte aún que la anterior, ya que falleció en Túnez víctima de la peste junto
a una gran parte de su ejército (1270).